El mundo en tus pies

El año de las carreras populares ha arrancado y ya hemos dejado atrás los 10 kms de Trevías del día 27 de enero, y los 8.500 metros de la VII Vuelta Pedestre de Ribadesella de este pasado sábado 2 de febrero. La siguiente meta volante nos la encontramos en Llanera, donde el 17 de este mes se correrá la primera Media Maratón asturiana del año, "en el corazón de Asturias".

Pero hoy no vamos a hablar de carreras, si no de cómo corremos. ¿Qué os parece si nos quitamos las zapatillas y pisamos el asfalto?¿Habéis oído hablar de la propiocepción o control del movimiento desde el cerebro? ¿Y del barefoot running? 

Un buen conocedor de esta disciplina, el orensano Antonio Madriñan, nos apunta en su blog una serie de artículos sobre esta técnica que algunos justifican como una vuelta a los orígenes humanos de correr descalzos, disciplina que sin llegar siempre a esos extremos, está evolucionando a través del diseño de las zapatillas minimalistas. En esta extendida técnica sobre la que hay mucho escrito, la zancada adquiere más protagonismo, se reduce la amortiguación de la pisada, y tanto la musculatura como las articulaciones se fortalecen. La transición a esta nueva forma de correr requiere una adaptación, durante la cual pueden ser habituales los dolores musculares o las lesiones. 
¿Nos atrevemos a cortar nuestras zapatillas? Algunos defensores de la técnica dicen que estas modifican nuestra forma de correr y caminar, haciéndola menos eficiente, mientras que sus detractores afirman que correr descalzo no es tan efectivo como hacerlo con unas ligeras zapatillas de deporte. 

Tenemos tan cerca la playa que un día deberíamos atrevernos a trotar descalzos sobre la arena. Seguro que si se lo proponemos a Antonio nos acompañará y nos dará una clase magistral sobre la técnica. Y ya que os lo hemos presentado, os animamos a conocer su libro: "El mundo en tus pies".